No existe una Iglesia Anglicana como institución, con personería y autoridad jurídica global,  ya que cada iglesia nacional o regional tiene completa autonomía en asuntos doctrinales y económicos.
Como su nombre sugiere la Comunión Anglicana es una asociación de iglesias en completa comunión teológica con la Iglesia de Inglaterra, más específicamente con el Arzobispo de Canterbury.

El Arzobispo de Canterbury, Líder religioso de la Iglesia de Inglaterra es reconocido como jefe simbólico- histórico de la Comunión, en su rol de “primus inter pares” o "primero entre sus iguales."
A veces se compara al Arzobispo de Canterbury con otros líderes religiosos, como el Papa católico romano, o el Patriarca de la Iglesia católica Ortodoxa, pero su papel es ser el vocero ante  los medios de comunicación, puesto que no posee ninguna autoridad eclesiástica- legislativa fuera de su territorio.
La condición de estar en completa comunión significa que todos los ritos conducidos en una iglesia y fundamentos teológicos  son reconocidos por la Iglesia de Inglaterra (que se puede considerar como la “iglesia madre”) y por las demás Iglesias miembros de la comunión  que se reconocen explícitamente como anglicanas y otras como las Iglesia episcopal de Estados unidos y la Iglesia episcopal de Escocia y la Iglesia episcopal de Irlanda, prefieren un nombre distinto por razones políticas.

Cada iglesia tiene su propia doctrina y liturgia, basadas, en la mayoría de los casos en las de la Iglesia de Inglaterra, y cada iglesia tiene su propio sistema legislativo y política episcopal, bajo la dirección de un  Obispo primado local (Obispo moderador, Arzobispo, Obispo Presidente, u otra nominación).
La  gran familia Episcopal- Anglicana esta formada por 80 millones de miembros de 44 Iglesias  en 160 países  que forman 38 provincias, y 6 iglesias en comunión.